Esta semana Pilar Astray Boadicea nos trae una oración que interpela a lo más hondo de nuestro ser. Con todos vosotros Clamor de pecadora de Pilar Astray Boadicea.
Clamor de pecadora
Es mi búsqueda arriate que sollozo al cruzar. Es tu templo un silencio que deseo callar encerrada en preguntas antiguas clamor de pecadora. No es mi piel la que bendices, Señor que llenas de fe las celosías. No es mi verso el que flamea sobre las alas negras. No soy yo la que gesta ni la que ama con certeza. No lleva mi cabello un velo de elegida ni son mis manos las que cosen en tu pecho la grímpola. No son mis pies los que lavas. Ni mi voz la que lee tu escritura sedienta con permiso de hombres vigilando tu casa. No soy la que sabe. No soy yo la que nombras hundir bajo tu arcángel. No es mi vientre vasija. Ni mi voz tu promesa. Es mi búsqueda un lago desbordado en sus dogmas es mi pecado una flor sobre el tambor derramándose tu canción de cuna, Señor. Mi clamor de pecadora. Como Jacob he cubierto mis brazos con los restos del cordero que habité para ser la pastora me disfrazo quiero beber de tu boca hoy soy tu impostora. Lo sabías en aquel momento y lo sabes ahora: no es este olor el que merece tus campos pero son nuestras ausencias las que van a sembrarlos. Es mi búsqueda arriate que sollozo al cruzar. Es tu templo un silencio que deseo callar encerrada en preguntas antiguas, mi oración se vacía.
Por Pilar Astray Boadicea