De mayor, quiero ser feliz
Ya es bastante duro ser siervo del dinero para vivir.
Quiero ser capaz de no guiarme por la codicia del dinero, sucio dinero. Saciarme de detalles y momentos inmortales, que ese sea mi tesoro y no el dinero, macabro dinero. Alegrar mis oídos al escuchar el eco metálico de aguas manantiales, no el tintineante aullido del dinero, estruendoso dinero.
Pasar con lo justo y beber la sabiduría de la Vida sin ahogarme por la coacción apremiante del dinero, censurable dinero. Prefiero sentir la presión de hacer malabares con calderilla que construir figuras y torres de monedas y billetes, amontonando más y más dinero, absurdo dinero.
Me llena más mezclar mantequilla y harina barata que amasar sin escrúpulos tanto dinero, asqueroso dinero. Escalar una montaña modesta con mis escasos recursos que atesorar montañas de dinero, amoral dinero. Opto por alardear de contar nuestros cabellos plateados mientras nos abrazamos antes que enumerar la plata del dinero, puto dinero.
En el fondo, todos sabemos que la causa de tanta violencia es por culpa del dinero, opresor dinero.
Ya es bastante duro ser siervo del dinero para vivir. Aunque me suponga ser objeto de burla, de mayor quiero ser feliz. No entra en mis planes dar prioridad al dinero, dependiente dinero.
Gracias a Tierra Trivium por abrazar mis letras.